¿Si me preocupo por mis hijos soy mejor madre?
A veces, erróneamente, creemos que cuanta mayor preocupación mostramos por nuestros hijos mejores madres somos.
No fue hasta hace un par de años que me di cuenta de la pérdida de tiempo y energía mental que me provocaba el estar eternamente preocupada por mis hijas.
Cuando se iban de colonias, dos o tres días, me pasaba todo el tiempo pensando en qué estarían haciendo. Montándome mis propias películas de terror.
Sin embargo, preocuparte no sirve de NADA.
Preocuparte te mantiene en un estado de eterna reflexión.
Preocuparte te aleja del único momento que realmente existe y cuenta: el ahora, el presente, el hoy.
Preocuparte te lleva a un futuro que no sabes cómo será y que adelantarte e imaginar cómo será no te sirve de nada. Lo único que te aporta es sufrimiento, si lo que imaginas es negativo.
¿Consideras que es mejor madre una que siempre está preocupada por sus hijos?
Yo no.
Al contrario, echa a perder esos momentos presentes. Donde su cuerpo está fisicamente pero su mente está en otro universo.
Con esto no quiero decir que te despreocupes.
Todo lo contrario, ocúpate de tus hijos cuando estés con ellos: jugando, cocinando, caminando, viajando. Las demás cosas pueden esperar.
Cuando no estás con ellos y has decidido hacer otra actividad , disfruta. Pásatelo bien, sin remordimientos.
El hecho de ser madre no tiene porque ser sinónimo de abnegación las 24 horas del día.
Centra tu atención y energía en las cosas que haces cada día.
No pierdas ni un minuto más preocupándote.
Si logras estar presente, disfrutarás más de las cosas.
Podrás apreciar la brisa suave de la mañana al ir a tu trabajo.
Sentirás el aroma del café.
Podrás apreciar los pequeños detalles de la vida.
¿Qué es lo que más disfrutas hacer y por estar preocupada no acabas de disfrutarlo al cien por cien?
¡Coméntalo aquí abajo!
Deja una respuesta